Sekou Gassama, internacional Sub-20 con Senegal, se ha convertido en jugador del Universitario de Deportes de Perú. Con pasado en clubes españoles como el Rayo Vallecano, el atacante llega como agente libre desde el Eldense con la intención de aportar potencia, experiencia y competitividad al proyecto para 2026.
Sekou Gassama un nuevo reto en Perú
El atacante hispano-senegalés Sekou Gassama, que ha vivido en España y se ha criado en Cataluña, ha sido anunciado a la edad de los 30 años, como un nuevo fichaje del equipo de los cremas de Perú. Este fichaje suma, potencia y garra al equipo, para ser más competitivo en el 2026. La «Pantera», llega con una grandes expectativas al club Universitario de Deportes de Perú y se prevé que haga buenas actuaciones. Sekou Gassama ha fichado tras quedar libre en el verano de 2025 con el Eldense, de la segunda división española.
Sekou Gassama un jugador que desde joven se sacrifico en el fútbol y creció en la cantera del FC Barcelona, entre otras. Sekou Gassama, a sus 30 años tiene un largo recorrido futbolístico. Durante su etapa inicial como profesional en España, recorrió equipos como el Valencia, Rayo Vallecano, Málaga CF, UD Almería, entre otros. Pero no consiguió hacerse un hueco y se marcharía, a países como Chipre o Argelia para buscar una oportunidad.
Ahora debemos hablar del paso de Sekou Gassama por el Rayo Vallecano, que le sirvió para formarse y madurar como delantero, algo de lo que esta muy agradecido a la entidad franjirroja. Su paso por el equipo del barrio de Vallecas, se dio principalmente en el filial, donde dejo destellos de su potencia y poderío físico como delantero. En Vallecas encontró un contexto exigente, marcado por la intensidad competitiva y una identidad de juego directa, que le permitió crecer en aspectos fundamentales como el juego de espaldas, el trabajo sin balón y la contundencia en el área.
Sekou GassamaSekou Gassama no llegó a consolidarse en el primer equipo, pero su experiencia en el Rayo Vallecano supuso un punto de inflexión dentro de su trayectoria. El club madrileño le ofreció continuidad, minutos y un entorno en el que competir cada fin de semana era una obligación, algo que terminó reforzando su carácter y su mentalidad profesional. Aquella etapa le sirvió como trampolín para seguir construyendo una carrera marcada por la movilidad entre clubes y la búsqueda constante de protagonismo en el fútbol profesional español.
