El panorama automovilístico cambia constantemente y más que lo puede hacer tras la presentación, por parte de la empresa británica AltoVolo, del vehículo volador Sigma, un modelo híbrido-eléctrico de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL) diseñado para uso personal y que cuenta con una autonomía estimada de 820 kilómetros y una velocidad de crucero de 220 mph, unos 350 kilómetros por hora. Desde la compañía aseguran que este innovador vehículo será hasta un 80% más silencioso que un helicóptero.
Un diseño aerodinámico
El Sigma es un modelo triplaza que tiene un diseño aerodinámico avanzado. Con una envergadura de casi 5 metros, 4,8 exactamente, su estructura compacta permite un uso eficiente del espacio, similar al ancho de una plaza de garaje doble. Su motor, con 1.608 CV de fuerza, está diseñado para mantenerse en vuelo incluso si uno de los jets falla, por lo que está plenamente garantizada la seguridad.
El gran secreto del excelente rendimiento de este Sigma está en su propulsión híbrida, que se basa en un sistema de jets electrónicos inclinables. De acuerdo con AltoVolo, este diseño permite utilizar baterías para el despegue y aterrizaje vertical, mientras que para los vuelos largos emplea combustible líquido. De esta manera consigue lo mejor de ambas opciones en cuanto a eficiencia y autonomía.
Un coche volador para evitar el tráfico terrestre
A diferencia de otros modelos que han aparecido en el sector eVTOL, como fueron los casos de Midnight de Archer Aviation o el de Joby, que buscaron posicionarse en el mercado de taxis aéreos, AltoVolo apunta a un público totalmente opuesto. Y es que desde la firma británica se pretende que Sigma se convierta en una alternativa a los helicópteros privados, un vehículo ideal para los empresarios y los viajeros de alto nivel que desean evitar el tráfico terrestre con una aeronave rápida y discreta.
En términos de peso, el Sigma está en los 970 kilos, incluyendo tres pasajeros a bordo. Una cifra parecida al exclusivo hipercoche Gordon Murray T.50.
Ya se han realizado las primeras pruebas con Sigma
Aunque Sigma es todavía un proyecto que está en fase de desarrollo, desde AltoVolo aseguran que ya han comenzado las primeras pruebas de vuelo con prototipos y que se encuentra en fase de construcción de un demostrador a escala real. Además, desde la compañía cuenta con el apoyo de ANSYS, empresa que está especializada en simulaciones para equipos de Fórmula 1, algo que refuerza la viabilidad técnica del vehículo.
En el apartado de seguridad, AltoVolo ha elegido a Embention, una empresa que se dedica a los sistemas de control de vuelo autónomo. Aunque antes de empezar a volar con Sigma, AltoVolo deberá conseguir la certificación federal, algo que no se obtiene rápidamente, pues es un proceso largo y complejo.
A pesar de los avances prometedores que se han hecho últimamente, todavía queda mucho camino por recorrer antes de que el modelo Sigma sea toda una realidad comercial. La empresa confía en abrir una lista de espera para pedidos anticipados este mes de julio y a partir de ahí seguir dando pasos en este ambicioso plan de desarrollo.
La pregunta que mucha gente se hace es si Sigma será capaz de superar los retos técnicos y regulatorios para convertirse en una revolución en la movilidad aérea o, si por el contrario, terminará siendo otro proyecto eVTOL que no logra despegar. Por el momento, las expectativas sobre Sigma son altas y sólo el tiempo dirá si este coche volador cambiará, o no, la forma en la que viajamos de un lado para otro.