Una nueva polémica, y no será la última, para Tesla. En esta ocasión tiene que ver con su tecnología de conducción autónoma Full Self-Driving (FSD), una denominación que siempre ha generado controversia por no ajustarse para nada a la realidad, y con nuestro país, concretamente con la capital.
Hace unos días la marca automovilística publicó una serie de videos en los que podía ver un Model 3 probando su tecnología de conducción autónoma por alguna de las zonas más conocidas de la ciudad de Madrid, como por ejemplo la Puerta de Alcalá y el entorno del Parque del Ben Retiro. Pero la jugada no le ha salido bien a la firma, que buscaba una gran acción de marketing y les ha salido mal, ya que no contaban con la autorización necesaria.
Según desvelaron varios medios nacionales, la marca del controvertido Elon Musk no tenía el visto bueno del Consistorio madrileño para probar, tal y como lo estaba haciendo, su tecnología FSD por las calles de la ciudad. Es más, ni las autoridades municipales ni la Dirección General de Tráfico (DGT) estaban al tanto de la acción que Tesla realizó.
Se exigen explicaciones a Tesla
Al otro lado del charco, en Austin, Estados Unidos, Tesla está probando, parece ser que con éxito, sus primeros Robotaxis en carretera abierta. En Europa, utilizando el Model Y modificado, está en una fase también muy a tener en cuenta, ya que busca hacer operativa la tecnología FSD en el viejo continente.
A estos modelos de a firma norteamericana con la última versión del software de conducción autónoma se les ha podido ver en varias ciudades europeas. Así, la marca trasladó que “Tesla está trabajando actualmente con los organismos reguladores para obtener la aprobación de la Conducción Autónoma Total (supervisada) en Europa, con el objetivo de implementarlo en los vehículos existentes y nuevos lo antes posible”.
Pero en Madrid, Tesla no lo está haciendo de la forma legal, como se debería hacer, aunque siempre haya una persona al volante para tomar el control del vehículo en caso de que hubiese algún peligro. Así, el delegado de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de la capital española, Borja Carabante, recordó que el vehículo en cuestión “necesitaba un permiso que se tiene que emitir por la DGT” y habría que sumarle “un informe favorable del Ayuntamiento de Madrid”.
Desde el organismo de Tráfico recuerdan que “existe una reglamentación europea que establece las condiciones bajo las cuales se puede autorizar este tipo de vehículos en circulación ordinaria por las ciudades”. Además, se han dirigido a Tesla y esta explicó lo siguiente: “Estos vídeos se han grabado a bordo de un Tesla Model 3 de producción, con el mismo hardware de los vehículos entregados a los clientes. La única diferencia es el software, que corresponde a una versión de pruebas en fase de desarrollo”.
Por parte del consistorio capitalino, en palabras delegado de Medio Ambiente y Movilidad, se añadió que “lo que sí depende del Ayuntamiento es establecer ámbitos donde se pueda innovar, donde se pueda probar, donde Madrid pueda ser un banco de pruebas para ese tipo de vehículos de movilidad conectada y de movilidad autónoma”.
Hay que recordar, para poner un poco más en contexto sobre la tecnología FSD, que la misma funciona mediante cámaras convencionales, software de reconocimiento visual e Inteligencia Artificial. Y es que su CEO, Elon Musk, no quiere saber nada de los sensores avanzados y LiDAR, que son aquellos que utilizan el resto de marcas que desarrollan sus sistemas de conducción autónoma.