Todos los días descubrimos algo nuevo y en ocasiones nos damos cuenta de que nuestra rutina, que creemos que es la ideal, no es totalmente correcta. Es lo que seguramente les haya pasado a muchos de los que han visto la publicación en redes sociales de la odontóloga Patty Cabo, que ha tenido una importante repercusión por su mensaje. Y es que según Cabo, la diferencia en la higiene bucodental puede estar en tomar, nada más levantarte, “un vaso de agua”.
La experta reconoce en su publicación que durante años cometió un error muy común y que, por tanto, “llevo toda mi vida lavándome mal los dientes”, asegura. El problema, según ella, comienza durante el sueño, cuando el pH de la boca se vuelve más ácido, lo que favorece la proliferación de bacterias. Este desequilibrio es la principal causa del mal aliento de las mañanas.
Así, muchas personas optan por cepillarse los dientes nada más despertarse o después del desayuno, sin saber que ambas acciones puede ser perjudiciales. Cepillar los dientes en un estado ácido puede provocar un desgaste del esmalte, mientras que posponer el cepillado tras ingerir alimentos implica que se ingieren también parte de las bacterias acumuladas durante la noche.
Un simple gesto que lo cambia todo
La profesional proponer un orden alternativo para mejorar la salud bucal. Su aportación es clara: “Al despertar, lo primero que tienes que hacer es beberte un vaso de agua”. Esta acción ayuda a neutralizar el pH de la boca y reducir la acidez provocada por el descanso nocturno.
Después de beber agua, Cabo sugiere esperar unos diez minutos antes de cepillarse los dientes. De este modo, se eliminan las bacterias acumuladas sin dañar el esmalte. Sólo entonces recomienda desayunar y, una vez finalizada la comida, volver a cepillar los dientes.
Desde primera hora de la mañana
La rutina que plantea la odontóloga se basa en evidencias fisiológicas y busca minimizar los daños que los errores cotidianos pueden provocar a largo plazo. Su fórmula es sencilla y eficaz: “Así empiezas el día con el estómago lleno y los dientes limpios”. Si se mantiene un rutina, habrá un gran impacto y positivo.
Más consejos de esta odontóloga para una gran higiene bucal
- Cepillar los dientes todos los días. Para tener los dientes sanos debes cepillarlos al menos tres veces al día y durante tres minutos. Se debe hacer después de cada comida para eliminar los restos que quedan en la boca.
- Cambiar el cepillo de dientes de forma regular. Al ser una herramienta tan importante para salud bucal es necesario mantener un control. Según la recomendación de los profesionales, hay que cambiarlos cada tres o cuatro meses.
- Mantener limpio el cepillo y el área del lavabo. Hay que asegurarse de enjuagar el cepillo con agua después de lavarte los dientes y guardarlo en posición vertical, sin cubrirlo.
- Usa hilo dental en cada cepillado. Hay que deslizar el hilo en el espacio entre la encía y el diente. Se debe usar para masajear suavemente el lado del diente en un movimiento hacia arriba y hacia abajo.
- Utiliza un enjuague bucal para proteger la boca. Además del cepillado diario y del hilo dental, usa enjuague bucal que contenga flúor para mejorar la salud oral.
- Controla el consumo de azúcar. El azúcar es el principal aliado de la aparición de caries en los niños. Por ello es necesario disminuir su consumo y cepillar los dientes después de tomar caramelos o dulces.
- Visita al dentista de manera regular. Así se detectan y tratan pronto los problemas que puedan aparecer.