A partir del próximo mes de octubre, Meta no permitirá anuncios sobre cuestiones políticas dentro de plataformas como Instagram Facebook o Threads en el territorio de la Unión Europea. Esta decisión tomada por la compañía de Mark Zuckerberg es la respuesta a la nueva normativa de la Unión Europea sobre transparencia y segmentación de la publicidad (TTPA), aprobada por el Consejo Europeo en el mes de marzo del pasado año, que tiene como objetivo contrarrestar la manipulación de la información y la “injerencia extranjera en las elecciones”.
De acuerdo a Meta, esta normativa introduce importantes retos operativos e incertidumbres legales: “Seguimos creyendo que la publicidad política en línea es vital para la política moderna, ya que conecta a las personas con información importante sobre los políticos que las representan y garantiza que los candidatos tengan una forma rentable de llegar a su público”.
La empresa se planteó dos alternativas. La primera fue la de modificar sus servicios, pero sin la garantía de que esta solución se considere conforme a la regulación. La segunda, dejar de permitir la publicidad política, electoral y social en la UE. Finalmente, desde Meta se decantaron por la eliminación de este tipo de contenido dentro de sus diferentes plataformas dentro de la UE.
Una decisión centrada en la UE
Desde la compañía de Zuckerberg se ha aclarado que esta decisión se centra en la UE y, por tanto, seguirá mostrando anuncios políticos en otros territorios: “Nuestra decisión es específica para la UE. En el resto del mundo, seguiremos ofreciendo nuestras herramientas líderes en la industria que garantizan publicidad política auténtica y transparente”. Esta iniciativa, señalan desde Meta, “tampoco impedirá que los ciudadanos de la UE sigan debatiendo política en nuestros servicios, ni que políticos, candidatos y cargos políticos produzcan y compartan contenido político de forma orgánica. Simplemente no podrán amplificarlo mediante publicidad de pago”.
Desde Meta añade que “regulaciones como la TTPA socavan significativamente nuestra capacidad para ofrecer estos servicios, lo que no solo afecta la eficacia de la difusión de los anunciantes, sino también la capacidad de los votantes para acceder a información completa”.
Por tanto, Meta anunció que será a partir del próximo mes de octubre cuando dejará de permitir los anuncios sobre temas políticos, electorales o sociales en sus diferentes plataformas dentro del territorio del viejo continente debido al nuevo reglamento sobre Transparencia y Segmentación de la Publicidad Política (TTPA). El reglamento fue tiene el objetivo de contrarrestar la manipulación de la información y la “injerencia extranjera en las elecciones”.
Prohíbe el uso de datos como el origen racial y la ideología
El estatuto incluye una serie de pautas que facilitarán reconocer los anuncios políticos con un etiqueta, comprender quién está detrás de ellos y saber si se han recibido como publicidad gratuita. Todo ello para que los usuarios “estén mejor preparados para tomar decisiones informadas”.
El reglamento exige que los datos recopilados para publicar anuncios políticos sólo se utilicen si el usuario da su consentimiento para utilizarlos con fines de publicidad política. Además, prohíbe el uso de algunos datos personales, como el origen racial, étnico y la ideología para elaborar perfiles.
Además, según Meta, la TTPA impone “importantes obligaciones adicionales” en sus procesos y sistemas, lo que se traduce en una “nivel insostenible de complejidad e inseguridad jurídica” para los anunciantes y las plataformas que operan en el territorio europeo.
Meta defiende la publicidad
Para la compañía, las restricciones impuestas por la UE limitarán la forma en la que los anunciantes de política pueden llegar a su público y, por tanto, “provocaría que los usuarios vean anuncios menos relevantes”. Añade que se trata de “una nueva amenaza a los principios de la publicidad personalizada” y defiende que la publicidad política “es vital para la política moderna”.
