La venta de ropa a través de diferentes aplicaciones se ha convertido en una práctica cotidiana para muchos ciudadanos españoles. En este mercado nos podemos encontrar desde prendas de marca a artículos de segunda mano. Así, plataformas como Wallapop y Vinted han visto como ha crecido de manera exponencial el número de usuarios que buscan sacar un dinero extra sin relativa facilidad.
Pero ojo, Hacienda ha puesto su objetivo en este tipo de negocio, que para muchos parecía algo simple y casi lúdico. El organismo tributario lo vigila tras la entrada en vigor de la directiva europea DAC 7, que obliga a las plataformas digitales a informar sobre los usuarios que tengan una actividad elevada y eso incluye a los que superan los 2.000 euros en ventas o las 30 operaciones al año.
Un cambio en la normativa
El 1 de enero de 2024 fue cuando entró en vigor la DAC7, que obliga a sitios como Wallapop o Vinted a remitir a la Agencia Tributaria la información de los usuarios que superan ciertos límites en un año natural. El objetivo no es otro que garantizar que la economía digital aporte su parte justa en impuestos y evitar que ciertos ingresos pasen desapercibidos.
Aunque, hay que decir, que superar estas cifras no conlleva que haya que tributar de forma automática porque Hacienda sólo exige declarar las ganancias patrimoniales efectivas. Es decir, cuando el precio de venta supera al de compra y genera un beneficio real.
Según varios expertos en esta actividad, “lo importante es entender cuándo se produce una ganancia patrimonial y cuándo solo es un intercambio entre particulares, que no genera obligaciones fiscales”. De hecho, la mayoría de las transacciones entre particulares no genera impuestos, aunque los usuarios deben tener cuidado y guardar los comprobantes de compra y venta como respaldo ante posibles requerimientos futuros.
Tributar y evitar problemas con Wallapop o Vinted
La clave está en la ganancia patrimonial. Si compras un artículo por 75 euros y se vende por 45 euros no existe la obligación de tributar. Per si este artículo se vende a 90 euros, sí surge la obligación de declararlo en el IRPF y se deberá hace en el apartado de “Ganancias y pérdidas patrimoniales derivadas de transmisiones patrimoniales”.
En cuanto a la tributación sobre la ganancia, se sitúa entre el 19% y el 23%, dependiendo del importe. Otros impuestos, como el de IVA no se aplican entre los particulares, salvo en casos de actividad habitual o profesional. El ITP, que teóricamente pagaría el comprador, rara vez se exige en ventas de coste bajo.
Para aquellas personas que realizan numerosas operaciones, es recomendable mantener un registro ordenado de los comprobantes y capturas en ventas. Esto no sólo facilita la declaración correcta, sino que también sirve de protección frente a posibles sanciones que pueden ir desde el 50% al 150% del importe adeudado. Las multas podrían ser de hasta 200 euros en casos de errores no identificables.
Según la opinión de los expertos, ante cualquier duda conviene consultar a un asesor fiscal. Es la mejor manera de asegurarse de cumplir con la ley sin complicaciones. Además, revisar el borrador de la declaración de la renta cuando llegue la campaña puede evitar sorpresas desagradables: si aparece la actividad y no hay ganancias, no hay problema. Si hay beneficio, habrá que declararlo de forma correcta para no atraer la atención de Hacienda de forma indeseada.
Por tanto, vender ropa por Internet puede ser una forma sencilla de aumentar tus ingresos, pero hacerlo sin conocer las implicaciones fiscales puede conllevar problemas con Hacienda. La clave, registrar todo de la manera correcta.
