El modo avión del teléfono móvil es una de las características más desconocidas del dispositivo. Su mayor uso se le suele dar al realizar un viaje en avión, pero tiene otras funciones que puede ser nuestras mejores aliadas en el día a día, que se pueden utilizar sin la necesidad de pisar un aeropuerto. Su activación nos puede ayudar en el ahorro de batería, obtener mayor cobertura, mayor seguridad y privacidad respecto a la información personal del dispositivo.
¿Cómo se activa el modo avión?
Activar el modo avión es muy sencillo. Sólo hay que deslizar un dedo en la pantalla y, al hacerlo, el dispositivo corta de golpe todas las conexiones inalámbricas: datos móviles, Wi-Fi, Bluetooth y GPS. Esta desconexión total, que en un principio sirve para que los sistemas de un avión no sufran interferencias, abre la puerta a otros beneficios que quizá no sabías y tras hacerlo seguro que te animan a activarlo más a menudo.
La relación con la batería y la cobertura
El primer beneficio está relacionado con la batería, uno de los grandes quebraderos de cabeza de una persona que utiliza en exceso su dispositivo. Al desconectarse de las redes, el dispositivo deja de consumir energía en un segundo plano, algo que pasa de forma constante cuando busca cobertura o trata de conectarse a redes Wi-Fi o recibe notificaciones. Como resultado, un ahorro de energía que puede alargar la autonomía durante varias horas, lo que puede venir bien en situaciones de emergencia.
Más interesante es lo que ocurre cuando se carga el dispositivo móvil con el modo avión activado. Al no gastar recursos en estar conectado a la red, se recarga con mayor rapidez. Es un truco que muchos usuarios utilizan en su día a día y que puede marcar la diferencia cuando necesitas subir la batería en poco tiempo.
La segunda ventaja de utilizar el modo avión tiene que ver con la cobertura, un problema muy común tanto en lugares masificados como en entornos rurales. En esas ocasiones en las que el móvil se ha quedado sin señal o tardar mucho en volver a conectarse, el mundo avión funciona como un reinicio exprés: basta con activarlo uno segundos y volver a desactivarlo para que el dispositivo reinicie la búsqueda de antena. En muchos casos, este gesto hace que se conecte a la torre más cercana y recupere la señal de manera más eficiente.
La seguridad y privacidad con el modo avión
La tercera ventaja está vinculada a la seguridad y privacidad, dos de los aspectos más importantes en un mundo en el que todo está conectado. Al utilizar el modo avión, el móvil bloque cualquier intento de conexión de forma automática a redes Wi-Fi abiertas o poco fiables, como por ejemplo las de cafeterías, aeropuertos o centros comerciales. Aunque son redes prácticas, también suelen ser una de las vías más comunes para que los ciberdelincuentes intenten acceder a contraseñas, correos electrónicos o datos bancarios. Con el modo avión encendido, se cierra esa puerta de inmediato y se reduce el riesgo de sufrir algún ataque.
Desconexión digital
Más allá de estas ventajas, hay quienes utilizan el modo avión como una forma sencilla de desconectar de las constantes notificaciones. Por ello, para descansar, estar más concentrado en el trabajo o tomar un descanso digital, activarlo es la forma más rápida de garantizar silencio absoluto sin tener que apagar el dispositivo.
El modo avión es una función clave para mantener el control de nuestro tiempo y nuestra seguridad digital. Cuando está operativo se desactivan todas las conexiones inalámbricas, lo que permite desconectar del mundo sin tener que apagar el dispositivo.