Como todo en la vida, el precio de la Lotería de Navidad también ha subido. Así, en la actualidad, el coste del décimo está en los 20 euros, pero todo apunta a que para 2026 habrá una nueva modificación y de nuevo aumentará, pudiendo establecerse en los 25 euros. Un gasto más para unas fechas señaladas, sobre todo para aquellos que buscan la suerte en más de un décimo o dos. Dolerá, como duele saber lo que costaba en sus inicios: 40 reales.
El precio ha ido subiendo con el paso de los años. En 1966, un décimo de Lotería costaba 500 pesetas y un año después se duplicó a 1.000 pesetas (6 euros). En los años 70, volvió a duplicarse, para pasar a 2.500 pesetas (15 euros) en los años 80. Justo antes de la llegada del euro, el coste alcanzó las 3.000 pesetas (18 euros).
Con la entrada en vigor de la nueva moneda, el precio se redondeó en 20 euros y en dicha cantidad se ha mantenido durante más de dos décadas. Pero ahora subirá una vez más, tal y como reclaman las asociaciones de loteros, que alegan que “no hay ningún producto que no haya subido desde 2002”.
¿Subirá el premio de la Lotería de Navidad?
Desde el lado de los loteros insisten en que su idea no es la de castigar al consumidor, sí la de aumentar los premios. En estos momentos, El Gordo reparte 400.000 euros por décimo, pero con la subida a 25 euros podría alcanzar la cifra de 500.000. En teoría, todos ganan: jugador, el Estado y loteros.
En palabras de Borja Muñiz, presidente de la Asociación Nacional de Loteros, “antes con El Gordo te podías comprar un Picasso; ahora, con suerte, una casa en las afueras”.
El valor sentimental más allá del precio
La Lotería de Navidad es algo más que dinero, se trata de emoción. El ritual de comprar el décimo en el mismo sitio de siempre, de compartirlo con familia o amigos y de escuchar a los niños de San Ildefonso cantando los premios cada 22 de diciembre. Todos tenemos la esperanza en unos números.
A pesar de ello, hay quienes consideran que una subida de precios sería un paso importante en la ruptura con la tradición, ya que para muchas personas supondría un esfuerzo mayor del que ya suponen los 20 euros por décimo. Es un gasto fijo en Navidad, como es el turrón o los regalos de Reyes, pero costaría un poco más participar en el sorteo, al menos se reduciría el número de décimos a comprar, que suele ser más de uno por persona.
Una tradición arraigada
Pase lo que pase con el coste del décimo de Lotería de Navidad, esta seguirá marcado el arranque de unas fechas especiales en España, porque se trata de una tradición muy presente en la sociedad y que sin duda permanecerá en pie porque es algo familiar. Cada año, millones de personas se reúnen frente a la televisión con la ilusión de que ver y escuchar su número como premiado.
Así que hay que estar preparados porque quizá para el próximo año toque pagar un poco más por el décimo, pero seguro que todos querrán seguir participando en un sorteo que forma parte de nuestras vidas. La recomendación que se hace es la de participar siempre gastando lo que una persona se pueda permitir, sin que el gasto repercuta de manera negativa en la economía familiar. No sería el primer caso que la suerte acompaña al que únicamente tiene un décimo.
