Es difícil sacar una familia adelante con dos salarios, mucho más hacerlo con uno, como le ocurre a muchas tanto en España como en otros puntos del planeta. En Francia, por ejemplo, una de cada cuatro familias está formada por un solo progenitor y en el 82% de los casos se trata de mujeres, tal y como refleja el Instituto Nacional de Estadística y Estudios Económicos del país vecino (INSEE) en un informe. Dentro de este colectivo se encuentra Cathy, una mujer de 38 años que ha compartido en un medio especializado en educación financiera, Goldy, cómo gestiona un presupuesto mensual de 2.000 eros para sacar adelante a seis hijos. Una tarea nada fácil a la que se enfrenta cada día.
Antes del nacimiento de sus hijos, Cathy trabajaba pero se vio obligada a dejar de hacerlo para centrarse en el cuidado de sus pequeños, que ahora tienen edades comprendidas entre los 5 y los 16 años. Sin ingresos que procedan de un trabajo, su economía depende totalmente de las ayudas públicas del gobierno galo, la pensión alimentaria y pequeños ingresos adicionales como por ejemplo la venta de artículos en plataformas de segunda mano. En su conversación, ha detallado que sus ingresos al mes se componen de:
- 890 euros de subsidios familiares.
- 700 euros en apoyo familiar (ASF).
- 135 euros en la prestación RSA (apoyo a la renta).
- 250 euros en concepto de manutención infantil.
Respecto a la última cantidad, Cathy señalaba que “hay que recalcular la manutención infantil” que le concedió su ex pareja y añadió que se encuentra “esperando la decisión del juez de familia”.
Ingresos absorbidos por los gastos
La suma total de lo que ingresa esta madre francesa asciende a 2.050 euros al mes. Esta cantidad se ve rápidamente absorbida por los gastos fijos, entre los que están el alquiler de una vivienda social, los suministros de luz y agua, el seguro del coche, internet, el seguro médico, dos líneas de teléfono móvil y la devolución de un préstamo, alcanzado en conjunto los 838 euros.
A todo ello hay que añadir gastos variables como la compra de alimentos, la atención médica, la ropa y el combustible, que suponen 1.230 euros al mes aproximadamente. Así, Cathy reconoce que su situación financiera “no es nada envidiable” y asegura que está “en descubierto todos los meses”.
Dejar el trabajo para cuidar a los hijos
En la entrevista, la protagonista comentó que tras la separación de su pareja, hace ahora cuatro años, obtuvo la custodia exclusiva de los seis pequeños. En un primer momento contempló la posibilidad de volver al mercado laboral, pero los elevados costes de las guarderías y el cuidado infantil le hicieron abandonar esa idea: “El cuidado de los niños era muy caro, así que no tuve más remedio que dejar de trabajar para cuidarlos”.
Cathy contó que logra salir adelante gracias a las prestaciones sociales del gobierno francés ya la pensión alimenticia que le abona su ex pareja, aunque reconoce que esta situación le genera sentimientos encontrados: “Me las arreglo para salir adelante gracias a las prestaciones sociales y a la pequeña pensión alimenticia que me paga mi expareja. Me avergüenzo, pero no puedo evitarlo”. Durante la entrevista, destaca que toda su vida gira en torno a sus hijos y que hace sacrificios para “darles pequeños placeres”. Además, sabe que estos es una “situación temporada y que las cosas mejorarán”. Reconoce también que su separación fue “un desastre en todos los sentidos, sobre todo en el económico” y que podría haberse hundido pero decidió “luchar” por sus hijos.
