La constante escalada de los precios del aceite de oliva ha generado un desafío considerable para la familias españolas. El llamado oro líquido, producto esencial en la gastronomía mediterránea, en tan solo el último año ha experimentado un aumento del 69,3% aproximadamente.
De hecho, de 6,91 euros que costaba en enero del 2023 ha llegado hasta 12 euros en enero del 2024.
Ante esta preocupante realidad y teniendo en cuenta su impacto en la cesta de la compra, los consumidores buscan formas innovadoras de maximizar el rendimiento de cada botella de aceite.
La estrategia del congelador para ahorrar mucho dinero
En medio de la creciente preocupación por los precios del aceite de oliva, ha surgido un truco que promete ser efectivo: el congelamiento del aceite de oliva.
Con esta estrategia además de optimizar el rendimiento se busca preservar el aceite en caso de que se compren grandes cantidades para ahorrar algo de dinero.
En qué consiste exactamente este truco de congelación del aceite
Este truco consiste en verter y congelar el aceite en los típicos moldes para hielos con el objetivo de crear porciones controladas y fáciles de manejar.
Es importante optar por moldes de silicona flexibles para facilitar la extracción de cada cubito de aceite. Posteriormente, deberías almacenar estos moldes en recipientes herméticos y así quedarían listos para utilizar en la cocina o directamente en tus recetas favoritas.
Sin embargo, probablemente te estés preguntando:
- ¿El aceite de oliva se puede congelar?
- ¿No perderá propiedades mi aceite de oliva si lo congelo?
- ¿Qué pasa si compro grandes cantidades de aceite de oliva y no la congelo?
La verdad es que hay varios puntos de vista y no hay una respuesta definitiva a estas preguntas. Veamos.
¿Se puede congelar el aceite de oliva?
La congelación del aceite es un proceso natural. Algunas personas sostienen que no altera los nutrientes ni el sabor del aceite de oliva virgen extra.
Porque de hecho, el aceite de oliva suele congelarse a una temperatura de -7 grados Celsius.
Sin embargo, otros expresan sus preocupaciones por una eventual perdida de algunos componentes beneficiosos durante este proceso.
No obstante, la realidad es que cada uno debería evaluar ambas perspectivas y decidir según sus preferencias de consumo.
¿Es necesaria la congelación del aceite de oliva para su mantenimiento?
La verdad es que no es necesaria la congelación del aceite de oliva para su mantenimiento. Lo crucial para determinar si un aceite es o no apto para el consumo, no es el tiempo que lleva en casa, sino las condiciones en las que almacenamos nuestro aceite de oliva.
Es decir, si el aceite lo guardamos adecuadamente en un lugar seco, fresco, oscuro y hermético conservará su calidad y será seguro para su consumo independientemente de si se congela o no.
La congelación pudiera ser una opción viable para aquellas personas que deseen prolongar aún más la vida útil del aceite o que necesiten conservarlo por períodos de tiempo muy largos. Sin embargo, no es estrictamente necesaria para garantizar su aptitud para el consumo.
Conclusiones
La estrategia de congelar el aceite de oliva se ha convertido en una solución práctica y efectiva para enfrentar los altos precios. Al dividir el aceite en pequeñas porciones controladas, se optimiza su uso y se garantiza su conservación a largo plazo.
Es crucial que adoptemos estrategias creativas y adaptadas a nuestras necesidades para seguir disfrutando de este preciado ingrediente en nuestras comidas sin que los exorbitantes precios se interpongan. Porque, lo cierto es que el aceite de oliva no es un producto más de la cesta de la compra, es el producto estrella de la alimentación española y de la cultura mediterránea en conjunto.