A veces, uno no sabe lo que está comprando. Se cree que es algo sin más y luego se lleva una sorpresa, para bien o para mal. En el caso de un vecino de Evanston, Illinois, para buen. Acudió a una tienda de segunda mano sin saber que de allí saldría con un auténtica joya de porcelana china. John Carcerano, con más de tres décadas de experiencia en la compra y venta de antigüedades, se topó con una bandeja de gran valor histórico que adquirió por 4,99 dólares, unos 5 euros al cambio, y hoy, de acuerdo a varios informes, hay casas de subastas que sitúan su precio en miles de euros.
El propio Carcerano comentó que la pieza que adquirió en su momento, perteneció a la época Qianlong de la dinastía Qing, alrededor de 1755. Esto la convierte en una auténtica rareza ya que “sólo se han vendido dos de estos en los últimos 50 años”. La bandeja, rectangular, cuenta con su escudo de armas característico y permanecía oculta entre otros enseres de mejor interés en la tienda de segunda mano. Con naturalidad, Carcerano comentó que sólo la detectó al ver la parte inferior ligeramente decorada, algo que pasaba desapercibido para los demás compradores.
Unas cifras muy elevadas en el mercado
La porcelana antigua, sobre todo si procede de la dinastía Qing, cuenta con un alto valor en el sector de las antigüedades. Los expertos de varias casas de subastas norteamericanas han verificado la autenticidad de la bandeja y confirmado que su estado de conservación es excepcional. Este es uno de los motivos por los que su valor puede alcanzar los 6.000 dólares, unos 5.500 euros, una cifra muy a tener en cuenta para alguien que apenas se gastó 5 euros en la compra.
Además, hay otros factores que justifican este precio tan alto:
- Sólo se han catalogado un par de estos ejemplares en medio siglo.
- Estado de conservación. La porcelana conservar su esmalte sin apenas desgaste.
- Autentificación. El respaldo de importantes casas de subastas confirma su procedencia.
- Demanda en el mercado internacional. Coleccionistas de todo el mundo pujan alto por piezas exclusivas.
- Prestigio histórico. La dinastía Qing abarca uno de los periodos más admirados de la porcelana china.
La validación de que estaba ante una joya
Carcerano siguió una serie de pasos para comprobar tenía una auténtica joya en su poder. Estos fueron:
- Observación inicial. Revisó con detenimiento la bandeja en la tienda.
- Uso de tecnología. Empleó Google Lens para identificar artículos similares.
- Búsqueda de referencias. Investigó subastas previas en las que se hubiesen vendido unas piezas similares.
- Verificación personal. Consultó varias casas de renombre para asegurar su autenticidad.
- Comparación de precios. Analizó el mercado para saber el valor aproximado de la bandeja.
Seguir cada uno de estos pasos le permitió estar seguro de que la pieza podía alcanzar un valor muy superior a lo pagado en la tienda de segunda mano.
Las tiendas de segunda mano, cada vez más demandadas
Descubrimientos como el de esta bandeja y su conocimiento por parte de la sociedad hacen que cada vez más personas vean las tiendas de segunda mano como lugares en los que, además de adquirir a precios más baratos, pueden tener una recompensa inesperada. Muchos aficionados a las antigüedades, como es el caso del protagonista de esta historia, afirman que la emoción de encontrar una pieza única es impagable. Carcerano asegura, por su experiencia, que acudir a barrios de mayor poder adquisitivo aumenta las probabilidades de hallar objetivos de gran valor histórico y artístico.