Es habitual ver a personas trasportar en un coche diferentes objetos que, aunque no lo parezcan, pueden ser peligrosos tanto para el propietario del vehículo como para los demás con los que comparte la vía. Los automóviles son prácticos, pero hay que tener mucho cuidado y pensar bien qué es lo que se puede llevar, ya sea en el maletero, los asientos o la baca. De lo contrario, puede haber grandes consecuencias y no sólo económicas.
Con seguridad, son muchas las cosas que se pueden transportar. Y no por llevarlo en el interior del vehículo nos libramos del castigo o posible accidente. Lo primero es lo que le ocurrió a un conductor la localidad sevillana de Castilleja de la Cuesta, que hace unos días fue interceptado en un control rutinario de tráfico y la sorpresa de los agentes fue total: lo llevaba lleno ladrillos sin ningún tipo de medidas preventivas. Además, no contaba con el carnet de conducir.
Sin una explicación clara
Según la información que recogió la agencia EFE de fuentes de la Policía Local de Castilleja de la Cuesta, las autoridades de la localidad estaban haciendo una control rutinario de tráfico en la carretera y le dieron el alto a un Citroën Xsara. Cuando echaron del primer vistazo, los agentes se dieron cuenta de que el vehículo estaba lleno de ladrillos repartidos por todos los compartimientos del coche: había ladrillos en el maletero, en los asientos traseros y en el delantero del acompañante.
Cuando el conductor fue preguntado por los agentes del motivo por el que transportaba en el coche tal cantidad de ladrillos, este les explico a los policías que los ladrillos estaban destinados a un obra en la que estaba trabajando, sin ofrecer ningún otro tipo de información ni explicar el motivo por el que no había hecho el transporte de este material en una furgoneta especial.
No era el único delito
Todavía no se había desvelado otra de las sorpresas, además de la tener el coche repleto de ladrillos, algo de por sí ya muy peligroso. Además, los policías locales sevillanos comprobaron que el conductor del Citroën Xsara no disponía de carnet de conducir y tampoco de número de documentación legal para residir y trabajar en nuestro país.
En este sentido, la Policía ha destacado la peligrosidad de la acción ya que cualquier movimiento de los ladrillos transportados en el vehículo podría haber puesto en peligro tanto la seguridad del conductor como la del resto de usuarios de la carretera.
Le salió caro transportar eso en el coche
Seguro que el conductor no pensaba que lo iban a detener y mucho menos que el castigo iba a ser tan alto. Fue castigado por lo siguiente:
- Conducir sin carnet. Esto puede acarrear una sanción administrativa de 500 euros. Además, se tendrán en cuenta las circunstancias de cada caso concreto y si es considerado como un delito, puede haber penas de prisión de 3 a 6 meses o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días.
- Multa por la carga que llevaba. De acuerdo con el artículo 14 del Reglamento General de Circulación (RGC), se establece que “la carga transportada en un vehículo, así como los accesorios para su sujeción o protección, deben estar dispuestos y, si fuera necesario, fijados de manera que no puedan arrastrarse, caer parcial o totalmente, o desplazarse de forma peligrosa”. En el reglamento se recoge que no cumplir con esta norma conlleva una multa de hasta 200 euros.