A la hora de cuidar lo máximo a nuestro coche, todos ponemos más atención en lo superficial, en lo que se ve. Estamos atentos a todo aquello que está a nuestra vista y a la de los demás. Sin embargo, en muchas ocasiones pasamos por alto velar por la protección del motor y otros sistemas de funcionamiento. Y ahí es cuando podemos tener un problema. Uno de los temas más importantes a la hora del mantenimiento del vehículo en el mejor estado posible está en saber cuidar el depósito del mismo.
Últimamente, con motivo de las constantes subidas económicas del precio del carburante, a veces preferimos, por diferentes motivos, no llegar el depósito. Pero es un error, tal y como explica el técnico Joseba Barrenengoa. Así, es probable que, por la cuestión que sea, alguna vez hayamos ido a la gasolinera a repostar una pequeña cantidad de carburante porque consideramos que no se necesita más. Aunque en principio no tiene ninguna trascendencia, si esta acción se repetir puede ser grave para la vida útil del turismo. Barrenengoa quiere concienciar a los conductores y hacerles ver la “eficiencia” de conducir con el automóvil lleno o al menos a la mitad. Y es que el organismo del vehículo se ve averiado siempre que se produce un mal uso del motor.
Mediante la cuenta oficial de la red social Instagram de EasyGas Group, su fundado y director ejecutivo, expuso sus opiniones en un vídeo. La falsa confianza de que así se ahorra en realidad “sólo es un mito” más de los muchos extendidos en nuestras costumbres. Se une además a las manías que tenemos en el momento de conducir, que según varios profesionales no son muy lícitas.
El problema de ir con el depósito vacío
Para Barrenengoa, el hacer muchos repostajes en un corto espacio de tiempo conlleva “la condensación de agua dentro del depósito”. A esto añade que el supuesto comentado anteriormente: «Si tú eres de las personas que te gusta llevar el tanque medio vacío y echándole de cinco en cinco euros. Tienes una bolsa de aire muy grande en tu coche que condensará mucho agua». Es este filtro el principal motivo por el que se acumula el agua ya que “cuanto más aire haya en tu tanque, más te va a condensar”.
El técnico hace otra aclaración y es que el combustible no tiene esa agua sino que es el fruto de un encuentro físico entre el aire caliente que está dentro y las paredes frías del tanque. Así se crean las botas de agua. Y para solventar este problema, los automóviles más modernos cuentan con un filtro que sirve para retener estas sustancias: «Si esas gotas de agua pasaran hacia el motor, hay un filtro que se para. Aparte de filtrar las impurezas, también filtra el agua», comentó el ingeniero.
Los consejos para ahorrar combustible
Si tras leer esto apuestas por llevar siempre el depósito lleno o a niveles importantes, siguiendo los consejos de Barrenengoa se puede ahorrar en los siguientes casos:
- Moderar la velocidad. Si se mantienen unos kilómetros moderados y constantes se reduce. Hay que evitar sobresaltos.
- Conduce con anticipación y evita los frenazos, pues este tipo de acciones gastan mucho carburante.
- Utiliza la relación de marchas más largas. Hay que limitar el uso de marchas cortas salvo en momentos imprescindibles como cuestas muy pronunciadas.
- Prescinde del uso de la climatización salvo en casos necesarios. Si el clima dentro del coche es cómodo, no malgastes gasolina.