En nuestro país contamos con muchas costumbres que vuelven locos, para bien o para mal, a muchos turistas: desde la siesta hasta el vermú. A unos les encanta y a otros no tanto. No se puede gustar a todos, eso está claro. Uno de los últimos ejemplos de algo muy nuestro y que ha causado revuelo en redes sociales ha sido cuando un turista británico compartió en redes sociales su descubrimiento: lamer un pie en público si es de fresa. Ojo, que hablamos del Frigopié, un helado clásico que, como otros, ha vuelto con fuerza este verano y para los más clásicos es algo más que un simple helado.
Pues algo tan normal y deseado para muchos españoles, ha dejado alucinando a gran parte de los turistas extranjeros que nos han visitado, los ha dejado atónitos. Al verlo en redes sociales, sobre todo se hizo viral en TikTok el vídeo del ciudadanos inglés, se ha hecho viral y muchos no saben qué hacer: si reír, preguntar o directamente salir corriendo al ver a una persona lamer un pie en público.
El surrealismo de nuestro país
La pregunta que se hace el turista británico al ver el helado lo deja claro: “¿Pero qué c* es esto?”. Esta persona sale en el vídeo con cara de asco y sorpresa lamiendo lentamente un pie rosado de crema y esto ha generado miles de comentarios, risas y sobre todo desconcierto en aquellos que no conocían el helado Frigopié. La forma, la textura y el concepto del producto es para muchos extranjeros una muestra brillantes del surrealismo español.
Este helado es un auténtico tesoro
Mientras que para los guiris, o parte de ellos, esto no tiene sentido, para los españoles todo lo contrario. No tardaron en salir comentarios defendiendo el Frigopié con entusiasmo. Para muchos españoles se trata de algo más que un helado: es un símbolo de la infancia, de veranos en casa de los abuelos, de meriendas en el chiringuito de la playa o de la piscina. En definitiva, un auténtico tesoro.
Pero no todo se queda en la visual. Y es que también han sido muchos, y aquí coinciden de diferentes nacionalidades, lo que han reaccionado con indignación con el nuevo precio: ha pasado de costar 1 euros a 3 euros en muchas heladerías y supermercados que lo comercializan.
Una ofensa a España, para muchos
Los usuarios de redes sociales españoles no tardaron en pronunciarse sobre la publicación del ciudadano británico y le advertían que si se metía con el Frigopié, “te metes con el país entero” ya que se trata de un helado “legendario”.
La lectura, más que interesante, que se saca de esta polarización generacional y cultural ha dado nueva vida al Frigopié. Los vídeos en los que los turistas lo prueban entre muecas, risas y cierto horror han hecho que se convierta en un fenómeno inverso: muchos españoles vuelve a comprarlo sólo porque les parecía una buena idea muy buena.
Y seguramente ahí esté el poder del Frigopié: en esa mezcla perfecta de desconcierto visual, sabor a fresa sintética y memoria emocional. Un producto que no ha cambiado en 30 años, pero que ahora se enfrenta a un nuevo reto: ser entendido en un mundo en el que lamer un pie es más raro que nunca aunque esté congelado.
Destaca de toda esta polémica la pregunta que se hacen muchos usuarios de redes sociales: “¿Quién es el enfermo que inventó el Frigopié: un helado rosa con forma de pie”. Pero ojo, que no todo ha sido negativo, ya que muchos hablan de sus bondades, como su gran sabor y su facilidad de consumo tanto para niños como para adultos.