La limpieza de la casa es algo que nos suele traer de cabeza, pero si ya hablamos del baño el problema crece, ya que es la zona, junto a la cocina, donde mayor higiene debe de haber. Y dentro del baño están las temidas mamparas de ducha. Y es que muchas veces nos resulta imposible quitarle, ya no la suciedad, sino las marcas de gotas de agua, jabón y la temida cal. Pero traemos el truco definitivo que dejará estos cristales como nuevos.
Además, dependiendo de la zona en la que vivas, será más o menos habitual que la cal sea tu pesadilla. De todos modos, hasta en las zonas en las que el agua es de mejor calidad tiene parte de cal. Así que no te preocupes que limpiar las mamparas de la ducha dejará de ser un problema.
Y es que si hay personas que saben cómo limpiar a la perfección y de la manera más rápida, estas son las camareras de piso. Así que hoy os traemos precisamente el método que utilizan en los hoteles para dejar impolutas las mamparas. Por supuesto, la efectividad de este método viene determinado por la combinación perfecta de los productos que os vamos a detallar a continuación. Finalmente, hay que recordar que para que los resultados sean óptimos y duraderos habrá que aplicarlo habitualmente.
El truco para limpiar las mamparas de ducha en un minuto
Estamos de acuerdo en que un baño limpio, además de necesario para evitar bacterias e infecciones, da sensación de hogar. Pero está claro que para tenerlo perfecto todos los días hay que invertir tiempo, ya que es la zona de la casa que más se usa. Así que para facilitarnos la tarea todo truco es bienvenido.
Lo bueno de este método que se usa en los hoteles es que no tendrás que recorrerte supermercado tras supermercado buscando un producto específico de esos que solo pueden comprar las cadenas hoteleras. Que va, nos fabricaremos nosotros mismos nuestro propio limpiador que será nuestro mejor aliado para limpiar de forma efectiva y rápida.
Así que lo primero que tenemos que hacer es buscar un pulverizador en el que mezclar los productos que os vamos a decir. Mira en tu cocina porque seguramente lo encontrarás, y es que la clave está en el vinagre, y no necesariamente tiene que ser el de limpieza, nos sirve el mismo con el que aliñamos la ensalada.
Eso sí, no lo vamos a usar puro, sino que lo vamos a mezclar en el pulverizador que hemos elegido junto con agua y, ojo, muy importante también el siguiente ingrediente: el bicarbonato de sodio. Es un producto que normalmente también tenemos en la cocina. Es más, si queremos que los polvos del bicarbonato se disuelvan bien podemos mezclarlo previamente con el agua (que la calentaremos) y ya luego procederemos a juntarlo todo con el vinagre. De este modo te aseguras que se disuelva.
Una vez lo tengamos todo pulverizaremos en nuestra mampara, por todos lados, que quede bien repartido por todos los cristales de la ducha. Tendremos que dejar esta mezcla unos 15 minutos para que haga su efecto y, una vez acabado ese tiempo, procedemos a enjuagarlo todo bien para que se elimine y así también se vaya el fuerte olor a vinagre.
Esta mezcla se convertirá en tu mejor aliado para quitar esas engorrosas manchas que se quedan en la mampara y, además, ayudará a prevenir que salgan más gracias al bicarbonato. Pero ojo, siempre será más fácil limpiar asiduamente con este producto a creer que con una vez es suficiente y ya nos olvidamos de la mampara hasta que vuelva a estar hecha un desastre.