Una plaga silenciosa y molesta. Es lo que se está viviendo en gran parte de España. Y no se trata de cucarachas o ratas, hablamos de una plaga que está pasando desapercibida, la de termitas, pero que lo expertos consideran como “el enemigo número uno de los edificios que contienen madera” y que pueden debilitar las estructuras de las casas ya que para llegar a la madera son capaces de perforar el hormigón.
La termitas se han convertido en una plaga invisible que están muy presentes en muchos de los domicilios de nuestro país, seguramente una cifra más elevada de la que podríamos imaginar. Hay que estar atentos a los muebles de madera que hay en los hogares, algo que es muy común, porque puede ser el inicio de un problema importante y que quizá no nos hayamos parado a pensar.
El enemigo número uno
Los expertos en este tipo de plagas aseguran que “son el enemigo número uno de los edificios que contienen madera” por lo que es muy importante estar al día en las revisiones y detectar a tiempo las termitas para controlar la plaga y evitar problemas mayores que puedan darse. Y es que “las termitas, aunque se alimentan de madera, también debilitan las estructuras de hormigón”. Lo hacen porque “para alcanzar la madera son capaces de perforar el hormigón”. Por ello, en toda casa que haya madera “es importante, sobre todo acerca de las que ya tienen unos años, estar pendientes a cualquier señal que nos pueda indicar la presencia de termitas”. Las termitas pueden dañar las casas mediante la madera, pero también mediante derivados como el aglomerado, papel, cartón y otros.
Un problema de interés público
La proliferación de termitas en los entornos urbanos ha convertido esta plaga en un problema de interés público en nuestro país, ya que su actividad no se limita a las propiedades privadas, sino que se extiende por el subsuelo, afectando a múltiples edificaciones dentro de una misma área. Dado su impacto, las administraciones públicas deben desempeñar un papel clave en su gestión y control puesto que en muchos casos la intervención requiere de coordinación municipal y el cumplimiento de las normativas específicas.
Para hacer frente a este problema, los ayuntamientos cuentan con un protocolo de intervención en el que se dan los pasos a seguir para la detección, evaluación y erradicación de estas plagas en áreas urbanas, en donde ocupan tanto espacio público como privado. Este protocolo permite una respuesta coordinada y efectiva para proteger tanto a las viviendas privadas como la conservación de edificios públicos.
Cómo podemos identificar la presencia de termitas
En muchas ocasiones la plaga de termitas es difícil de detectar porque no dañan la superficie de la madera y no hacen ningún tipo de ruido, son muy silenciosas. Algunos de los signos de alarma son los siguientes:
- Presencia en primavera de enjambres de termitas alados.
- Presencia de tubos de barro en las paredes o colgando de las vigas de madera.
- Ondulaciones en la pintura que recubre los elementos de la madera, sobre las que si presionamos observaremos que se hunden.
Con las plagas de termitas nos enfrentamos a un serio problema y difícil de erradicar. Por ello es importante contar con el apoyo de técnicos especialistas en el control de estos insectos, pues cuentan con el conocimiento y sistemas innovadores que priman la sostenibilidad y que garantiza el bienestar y la salud tanto de las personas como del entorno, actuando únicamente sobre esta plaga tan silenciosa como peligrosa.
