Aunque las hipotecas suelen ser un quebradero de cabeza para muchos de los que las piden, también permiten a gran parte de estos acceder a ser propietarios de una vivienda. Como se suele decir, es un mal necesario. Conllevan un gasto importante cada mes, pero tienes una propiedad que suele ser para toda la vida. Y ahora, si eres uno de los afortunados que compró una casa con hipoteca antes del 1 de enero de 2013, te puedes ahorrar miles de euros en la Declaración de la Renta.
Las hipotecas, un préstamo bancario al que cada día se recurre más, subieron durante 2024 en España, donde ser firmaron más de un 11% respecto al año anterior. Esto se traduce en el segundo aumento más alto desde los años de la burbuja inmobiliaria. Y en el arranque de 2025, en el mes de enero, se formalizaron en nuestro país nada más y nada menos que 38.058 hipotecas, un 18% más que en diciembre de 2024 y un 11%. Así, en cuanto al mes de enero de 2025, el préstamo medio tuvo un valor de 152.233 euros, una cantidad importante en la cuenta de gran parte de las familias.
Todo lo que sea ahorrar, bienvenido
El préstamo que nos da el banco, la hipoteca, hay que devolverla y se hace con intereses, por lo que todavía crece más la cantidad. Por tanto, cualquier posibilidad de ahorrar en esta partida es acogida como una gran noticia. Sobre todo ahora que estamos metidos de lleno en la campaña de la Declaración de la Renta y hay posibles deducciones fiscales que pueden favorecer a los titulares de la hipoteca.
Una de estas deducciones fiscales es la que sirve para compensar, en cierta medida, la subida de los intereses de las hipotecas. Pero por desgracia no es una posibilidad a la que puedan acceder todos. Como dijimos anteriormente, sólo podrán hacerlo aquellos que compraron una casa, con hipoteca, antes del 1 de enero de 2013. Los afortunados pueden reducirse del pago un 15% en la Declaración respecto de lo que haya pagado durante todo el ejercicio en concepto de intereses hipotecarios. Eso sí, hasta un máximo de 9.040 euros al año de acuerdo a los expertos en la materia. Esto quiere decir que esta persona podría ahorrarse hasta 1.356 euros con la Declaración. Importante, sólo es aplicable a la vivienda habitual, no a las segundas residencias.
¿Qué se puede incluir en la deducción?
Si se pidió la hipoteca para adquirir la casa, habitual, antes del 1 de enero de 2013 el titular de la misma puede incluir en la deducción:
- Los intereses que paga del préstamo.
- Lo que devuelve del capital, el dinero que le prestaron.
- Los seguros obligatorios que exige el banco, como el de vida o el del hogar.
Además, si el titular se cambió a otro banco, lo que se define como subrogación o mejora de hipoteca, no debe preocuparse porque puede seguir aplicando esta deducción sin problema tal y como confirmó Hacienda en sus informes oficiales durante los años 2015 y 2017.
Más ayudas para otros hipotecados
Si la hipoteca se pidió después del 1 de enero de 2013, el titular de la misma tiene otro tipo de ayudas si la tiene la vivienda alquilada. Se puede desgravar:
- Intereses del préstamo hipotecario.
- Gastos de formalización de la hipoteca.
- Gastos de mantenimiento, comunidad e impuestos como el IBI.
Obras en casa, también recompensadas
Si en la vivienda se hicieron reformas, por ejemplo para ahorrar energía, también puede repercutir en la Declaración de la Renta:
- Un 20% de deducción si bajó el uso de calefacción o aire un 7%. Hasta 5.000 euros.
- Un 40% si se bajó el consumo total un 30% o se mejoró la etiqueta energética. Hasta 7.500 euros.
- Un 60% si la vivienda ahora es de consumo casi nulo o tiene una calificación A o B. Hasta 15.000 euros.