Los amigos de lo ajeno siempre están al acecho y buscan, por lo general, a personas vulnerables para convertirlas en víctimas de sus actuaciones. Cada día crece la forma y el canal con el que realizan el engaño, siendo muy común el uso de las redes sociales y el correo electrónico, sin olvidarnos de llamadas telefónicas. El objetivo es suplantar la identidad y hacerse con un botín económico, tal y como ocurrió en una localidad murciana, Abarán.
Allí, un octogenario denunció que le estaban exigiendo el pago de un servicio que no había contratado y cuando la Guardia Civil se puso a investigar encontraron al presunto culpable de todo y no era una persona desconocida: era un vecino que no había dudado en utilizar los datos del anciano para realizar compras online.
Las sospechas que inician todo
La historia arranca cuando el anciano comienza a sospechar porque recibe reclamaciones de dos compañías de telefonía móvil que le exigen el pago de unas facturas que él nunca había contratado. Sorprendido y sin entender lo que estaba ocurriendo, acudió a la Benemérita, donde dejó claro que él jamás había solicitado ninguno de los servicios de las empresas.
A partir de este momento, los agentes especializados en ciberdelincuencia tomaron las riendas de la investigación. En primer lugar contactaron con las operadoras que le estaban reclamando el dinero y, tras revisar los contratos y movimientos, descubrieron que se la deuda correspondía a la adquisición de dos teléfonos móviles de alta gama: uno ronda los 1.400 euros y el otro superaba los 600 euros. Todo estaba a nombre de la persona de avanzada edad, pero sin que él hubiese visto los dispositivos móviles en ningún momento.
El delincuente no estaba lejos
Durante meses, los investigadores fueron tirando del hilo hasta dar con el presunto culpable. Lo que más sorprendió a todos es que no se trataba de un desconocido que había operado a través de Internet, todo lo que contrario. Era un vecino del propio afectado, un hombre de 52 años que no dudó en utilizar los datos los datos de octogenario para realizar las compras online.
Delitos de usurpación de estado civil y estafa
Por suerte, el plan no llegó a buen fin ya que el sospechoso, que además cuenta con un historial delictivo amplio, fue detenido y se enfrenta a delitos de usurpación de estado civil y estafa. Así, la operación quedó cerrada con éxito y dejando un aviso importante: cualquiera puede ser víctima de este tipo de engaños si no protege como es debido su información personal. Por ello, se recomienda revisar con frecuencia las facturas por si llega algún cargo inesperado y, si es así, denunciarlo ante las autoridades lo antes posible.
¿Cómo evitar que se suplante la identidad?
Desde el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) se aconseja cuidar bien todo lo que se comparte y para ello se dan algunos consejos:
- Ajusta la privacidad de los perfiles de redes sociales para que sólo las personas de confianza vean tu información. Hay que evitar publicar detalles personales como teléfono, dirección o fechas importantes.
- Usa alias en línea. En los foros, blogs o plataformas públicas, utiliza un apodo en lugar de tu nombre real para dificultar que te rastreen.
- Protege tu contacto. Hay que ser selectivo con tu correo y número de teléfono. Se recomienda usar correos temporales para sitios poco confiables.
- No se deben compartir contraseñas ni revelar datos sensibles. Además, nunca te los pedirán desde sitios institucionales por email o mensaje.
