Las estafas están muy presentes en el día a día, por desgracia, y llegan por todos los medios. Eso ha hecho que no confiemos demasiado en lo desconocido. Es una buena medida para evitar futuros problemas. Últimamente, cada vez más, han empezado a aparecer en los buzones postales muy llamativas de color naranja con un mensaje especial en el que se indica “Aviso importante”.
Si eres uno de los que lo ha recibido, lo primero que tienes que hacer, lo que se recomienda, es que te pongas en contacto con las autoridades y que les informes de la situación. Y es que detrás de esta cartas se esconde un fraude conocido desde hace años y cuyo objetivo no es otro que engañar a la gente para que suscriba costosos bonos u otras trampas con altos costes.
El fraude de la Tarjeta Naranja
Normalmente, cuando se recibe la tarjeta, el color y la urgencia del mensaje que se transmite es lo primero que llama la atención del destinatario. Pero lo que se recomienda por parte de las autoridades es mantener la calma, a pesar de lo que se diga en la carta. Y tener claro que, bajo ningún concepto, hay que llamar al número de teléfono que se facilita en la misma. Los que reciben este sobre deben ser conscientes de que el método descrito es un truco para presionar a los consumidores e inducirlos así a actuar de forma precipitada. Por tanto, lo mejor es ignorarla y no contactar con el remitente.
Hay más estafas por correo
El intento de engaño con la tarjeta naranja no es el único fraude que se ha llevado o se está llevando a cabo mediante cartas y postales. Hay otros habituales entre los delincuentes, como por ejemplo la estafa del cartero. La misma se basa en la manipulación de datos personales mediante el empleo de códigos QR.
La estafa empieza al recibir una carta con un código QR, pero cuando se escanea los usuarios lo que descargan es un malware. Así, este software malicioso puede interceptar mensajes, contraseñas e incluso los datos bancarios de la persona que ha escaneado el código con su teléfono móvil. Toda la información que contiene el teléfono puede ser vaciada en apenas unos segundos y sin que el propietario del dispositivo se dé cuenta.
Al igual que en otras estafas, hay maneras de prevenir caer en la trampa de los delincuentes. En referencia a la del cartero, nunca hay que escanear el código QR sin verificar su origen. Por tanto, no hay que hacer caso a estos códigos si provienen de personas o fuentes desconocidas.
Algunas de las estafas más comunes
- Los fraudes por SMS han sido una de las tácticas más utilizadas en el último año. Uno ejemplo: se recibe un mensaje de la entidad bancaria en la que la persona tiene una cuenta y se solicitan datos personales. Aquí se suele suplantar la identidad de bancos, empresas de servicios públicos o plataformas de correo electrónico.
- Llamadas engañosas. Es una de las estafas más sofisticadas, utilizan números reales y suplantan la identidad de las empresas de confianza para obtener información personal y financiera.
- Estafas de compra online. Han sido una de las más frecuentes en el último año. Los delincuentes clonan sitios web legítimos creando réplicas perfectas que ofrece descuentos irresistibles para atraer a los consumidores. No sólo engañan a los consumidores obteniendo sus datos bancarios, también roban información personal sensible. Suelen aparecer más en temporada de rebajas, cuando hay más opciones de que una persona caiga en la trampa.