El presente año se ha caracterizado por un hito trascendental en el sistema de pensiones, especialmente en lo que concierne a la pensión de viudedad, que ha experimentado un incremento significativo, proporcionando un alivio económico para aquellos que dependen de este beneficio.
Este aumento llega en un contexto de creciente inflación y apremio financiero para los ciudadanos, donde el poder adquisitivo se ve amenazado por el constante encarecimiento de los productos y servicios básicos.
Según datos revelados por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), los precios han aumentado en un alarmante 38% en los últimos tres años, impactando no solo en la cesta básica, sino también en la energía, combustibles y otras necesidades básicas para la población. Esta escalada de precios ha generado una carga financiera significativa para muchos hogares, exacerbada por los gastos asociados a hipotecas y alquileres.
Sin embargo, el aumento en las pensiones de viudedad se convierte en una esperanza en medio de la adversidad económica.
Subida de la pensión de viudedad
El incremento en las pensiones de viudedad se encuentra respaldado por disposiciones legales como el Real Decreto-ley 2/2023, del 16 de marzo, el cual introduce medidas urgentes para ampliar los derechos de los pensionistas, reducir la brecha de género y establecer un nuevo marco de sostenibilidad para el sistema público de pensiones. Esta normativa no solo persigue equilibrar el poder adquisitivo de los pensionistas frente a la inflación, sino también garantizar una protección adecuada para quienes han perdido a su cónyuge.
Los requisitos para acceder a la pensión de viudedad incluyen criterios relacionados con el tiempo de cotización del fallecido, la situación laboral al momento del deceso y la existencia de hijos en común. Por ejemplo, en casos de fallecimiento por enfermedad común, se requiere un mínimo de 500 días de cotización en los últimos 5 años. No obstante, en situaciones de accidente laboral o enfermedad profesional, este requisito no es exigido.
El cálculo de la pensión de viudedad varía en función de diversas circunstancias, como el estado laboral del fallecido y las causas de su muerte. Para aquellos que estaban jubilados o eran pensionistas por incapacidad permanente, la base reguladora coincide con la utilizada para calcular su propia pensión. Además, se consideran las revalorizaciones que hayan tenido lugar desde el cese de su actividad laboral.
En términos de cuantía, las pensiones de viudedad establecen montos mínimos tanto mensuales como anuales, adaptados a diferentes situaciones. Por ejemplo, aquellos con cargas familiares tienen una pensión mínima mensual de 834,90 euros, mientras que para quienes tienen una discapacidad del 65% o más, el mínimo es de 721,70 euros. En contraste, la pensión máxima alcanza los 2.707,49 euros mensuales.
Es importante destacar que no existe un plazo específico para solicitar la pensión de viudedad, aunque el periodo oficial para su aprobación es de 90 días, con tiempos de aprobación que pueden variar significativamente según el caso.
Cuándo es el próximo pago de las pensiones de viudedad
Fechas del pago de las pensiones de viudedad en Mayo
Estas son las fechas en los que los diferentes bancos de nuestro país van a efectuar el pago de las pensiones de viudedad durante el final de este mes de mayo:
- Bankinter: Jueves 23
- CaixaBank: Viernes 24
- Banco Santander: Viernes 24
- Banco Sabadell: Viernes 24
- Ibercaja: Viernes 24
- Laboral Kutxa: Viernes 24
- Unicaja: Sábado 25
- ING: Domingo 26
- BBVA: Lunes 27
- Abanca: Lunes 27
- EVO Banco: Lunes 27
Hay que tener en cuenta que estas fechas son orientativas y pueden estar sujetas a cambios por parte de las propias entidades bancarias. Las diferentes fechas en las que los bancos pagan las pensiones muestra las dificultades que envuelven el sistema bancario en nuestro país y cómo diferentes entidades manejan los pagos de pensiones de manera distinta.