Cuando entramos en la cocina, a la hora de ponernos a hacer la comida, suele ir todo sobre ruedas: el proceso, los últimos detalles y sentarnos en la mesa. Es lo mejor. Después de eso vienen los problemas, el momento de la limpieza y el tener que acabar con los restos de grasa que aparecen en la sartén y que por más que se fronte no terminan de desaparecer.
Con el paso del tiempo, los residuos que se acumulan en la sartén no sólo estropean su apariencia, también la dañan y afectan a su antiadherente. Pero esto no tiene que acabar con la sartén en la basura, pues existe un truco muy sencillo que nos permitirá eliminar la grasa que ha quedado incrustada en apenas unos minutos. La dejaremos como nuevo y sin hacer esfuerzo.
¿Cuál es el motivo por el que la grasa se pega tanto en las sartenes?
Los residuos de grasa que acaban acumulándose en las sartenes son el resultado natural de cocinar alimentos que contienen aceite. Al principio parecen fáciles de limpiar, pero con el paso de los días y tras varios usos, cada vez se adhieren más a la superficie y aumentan los problemas.
En las sartenes antiadherentes los restos de grasa suelen ser especialmente persistentes y si no se limpian bien pueden dañar el recubrimiento, haciendo que los alimentos se peguen con más facilidad.
¿Cómo eliminar la grasa en apenas 10 minutos?
Por suerte hay un truco bastante rápido y además económico que nos ayuda a eliminar la grasa incrustada sin tener que frotar con fuerza ni utilizar productos agresivos. A continuación te diremos los pasos a seguir para conseguirlo:
- Hay que calentar agua en la sartén. Después de usar la sartén, déjala enfriar un poco antes de comenzar con el proceso. Luego hay que llenarla con agua caliente, lo suficiente para cubrir las áreas de grasa. El calor ayudará a suavizar los residuos adheridos.
- Hierve el agua. Hay que colocar la sartén en el fuego y dejar que el agua comience a hervir. Este paso es crucial puesto que el calor conseguirá desprender la grasa, facilitando así su limpieza.
- Tienes que añadir bicarbonato y vinagre. Una vez el agua esté hirviendo es el momento de agregar dos cucharadas de bicarbonato de sodio y media taza de vinagre. Al mezclar ambos ingredientes se producirá una efervescencia que disolverá la grasa.
- Hay que dejar hervir sobre 10 minutos. El proceso permitirá que la grasa incrustada se afloje y se desintegre, facilitando su eliminación.
- Enfriar y limpiar. Pasados los diez minutos hay que retirar la sartén del fuego y dejar que se enfríe un poco. Una vez que el agua esté tibia, hay que vaciarla y usar una esponja suave para frotar. De esta manera la grasa se desprenderá con facilidad, sin tener que frotar mucho.
Con este sencillo y económico truco no sólo ahorramos tiempo, también se evita el uso de productos químicos agresivos y aseguramos que la sartén mantenga sus propiedades antiadherentes.
Más consejos para cuidar las sartenes
Para que las sartenes que tenemos en casa sigan como nuevas y duren el máximo tiempo posibles es necesario realizar algunos cuidados:
- Evita los estropajos metálicos, pues puede rayar la superficie de las sartenes deteriorando su recubrimiento antiadherente. Es mejor optar por esponjas suaves o trapos de microfibra para limpiarlas.
- No usar lavavajillas, aunque pueda hacerse. Lo ideal es lavarlas a mano para preservar su acabado y sus propiedades antiadherentes.
- Dejar que se enfríe antes de limpiarla. El choque térmico puede deformar la sartén, por lo que es importante evitar añadir agua fría a una sartén caliente.
