Si eres de esas personas que durante la madrugada se despierta y tiene problemas para volver a conciliar el sueño, lo que contamos a continuación sobre el truco del doctor Durán a través de su perfil de TikTok. En su publicación comenta que la tendencia de los que se desvelan “es tratar de quedarse en la cama dando vueltas, esperando a que el sueño regrese de manera desesperada”. Lo que él recomienda frente a lo que se conoce como el insomnio de mantenimiento, es “levantarse y hacer algo relajante que no active tu cerebro”. Se puede leer, escuchar la radio e incluso ver la televisión, “pero siempre con unas condiciones claras: a volumen bajo y con poca luz para no desvelarse por completo”.
El paso final que se debe dar es el de regresar a la cama cuando “cuando el sueño vuelva”, algo que el doctor asegura que siempre ocurre y de esta forma poder continuar durmiendo. Hay que recordar que tener un buen descanso es clave, pues la falta de sueño afecta tanto a la salud como al estado de ánimo al día siguiente.
Tres errores nocturnos que impiden descansar
Macarena Hernández, coach, también ofrece consejos relacionados con un el sueño, pautas que nos servirán mejor para dormir mejor y dejar a un lado esas noches en las que no se pega ojo. Así Hernández habla de tres errores muy comunes que no podemos cometer:
- Irse a la cama enfadado
El primer consejo de la experta se centra en el estado emocional con el que nos vamos a dormir. Hernández es tajante al respecto y subraya la importancia de resolver cualquier disputa o preocupación antes de finalizar el día: “Nunca, nunca, nunca te vayas a la cama enfadado”. La recomendación de la coach es clara: “Si existe alguna situación por resolver, hazlo y déjalo zanjado antes de irte a dormir”. De acuerdo con el planteamiento, mantener un conflicto abierto durante la noche interfiere con la calidad del descanso.
- La importancia de ventilar la habitación
El segundo hábito que pasa factura tiene que ver con el entorno físico del dormitorio. Hernández desaconseja por completo dormir con todas las puertas y ventanas cerradas, ya que impide la correcta circulación del aire. Por ello “nunca duermas con la ventana cerrada, la puerta cerrada, con todo cerrado” y propone un gesto tan sencillo como eficaz: “Deja la ventana abierta, aunque sea un dedito, para que pueda correr algo de aire y puedan fluir las energías”.
De acuerdo con Hernández esta práctica es beneficiosa incluso en los meses más fríos del año, cuando las bajas temperaturas invita a cerrar todo por completo. La experta insiste en que el resultado compensa la incomodidad inicial: “Da igual que sea invierno y haga frío, hazlo, notarás la diferencia por la mañana”.
- Agradecer antes de dormir
El tercer y último punto es de naturaleza más introspectiva, pues destaca la importancia de la gratitud como herramienta para cerrar el día de forma positiva. Hernández recomienda tomarse un momento antes de dormir para hacer un repaso mental de los buenos momentos de la jornada: “Nunca te vayas a dormir sin haber agradecido el día”.
La coach tiene claro que este simple acto tiene un efecto multiplicador: “En el momento en el que tú enfocas tu mente antes de ir a dormir en agradecimiento, en agradecer todo lo bueno que te ha pasado en el día, lo único que estás haciendo es multiplicar todas esas bendiciones para el día siguiente”.