Álvaro García ya es jugador del Rayo Vallecano. Y pinta a fichajazo. Extremo izquierdo, aunque también puede jugar de mediapunta. Habilidoso, veloz, con mucha calidad, capaz de driblar con el balón en los pies y con gol, mucho gol. No en vano la temporada pasada fue el máximo artillero del Cádiz con 10 tantos.
En 2013 debutó en primera con Alcaraz en Primera división en el Granada. Después, previo paso por el Racing de Santander, acabó en el Cádiz, en Segunda B, donde comenzó siendo suplente.
Alternaba la mediapunta con la banda izquierda, y fue progresando año a año. Su mejor habilidad es la velocidad con balón, capaz de marcar y asistir. Futbolista muy completo que además se sacrifica mucho en defensa.
Por fuera, por dentro… el eléctrico utrerano suele ser un auténtico dolor de cabeza para las defensas rivales. Ahora llega a un Rayo Vallecano que necesita sus goles y su juego más que nunca.
Para el Cádiz, es una operación redonda. Llegó con la carta de libertad y ahora se marcha por una cifra cercana a los cinco millones de euros. Para el Rayo Vallecano también lo es, se queda en propiedad con un prometedor jugador que puede marcar la diferencia.