El Rayo Vallecano Juvenil A dijo adiós a las pequeñas posibilidades que tenía para luchar por el título liguero, aunque la actitud de este equipo es la de no dar nada por perdido. El líder, el Atlético de Madrid, se impuso por la mínima con 0-1 en la Ciudad Deportiva.
El partido estuvo claramente marcado por la expulsión de Juanpe en la primera parte por una doble amarilla, ya que en los primeros minutos fue amonestado por un agarrón en la frontal del área, y antes de la media hora vio la segunda cuando cortó una jugada de peligro con la mano. Esto provocó que los de Ángel Dongil tuvieron que jugar más de 60 minutos con un jugador menos, retocando su sistema de juego.
Arrancó el partido con una defensa de 5, con Jorge Juanpe y Castro como centrales y Rubén de Tomás e Igor por las bandas. Con la expulsión del central, Arratia fue el jugador encargado de cubrir la posición en la zaga, debilitando el centro del campo. A pesar del desajuste, el equipo franjirrojo consiguió llegar al descanso manteniendo el 0-0.
Nada más comenzar la segunda mitad, Cedric adelantó al equipo líder del grupo, batiendo a Miguel con un balón cruzado. Le tocaba al Rayo remar a contracorriente jugando con uno menos, y una de las medidas que tomó Dongil fue la de prescindir de los jugadores de banda, Aguirre y Merencio, para reforzar la delantera con Molina y el centro del campo con Diego. Aún así, el Rayo no fue capaz de volver a igualar el marcador, pero sí fue capaz de mantenerlo, gracias a una increíble actuación de Miguel Morro.
Con esta derrota el Juvenil A se queda a 14 puntos del Atlético de Madrid y a 11 Del Real Madrid. Su lucha prácticamente será el tercer puesto en el que está empatado con el Real Valladolid a 36 puntos tras la victoria de los pucelanos 2-0 ante el Extremadura. Y solo queda pensar en el próximo partido, que será en 2019, comenzando con la visita al Alcorcón, donde ya solo se puede pensar en la victoria.