El Rayo Vallecano enlaza dos partidos consecutivos de LaLiga (tres contando el de Copa del Rey ante Unionistas) sin conocer la derrota. Un triunfo por la mínima ante el Valencia en Mestalla y un empate a tres frente al Real Madrid en el Estadio de Vallecas. Dos encuentros que sirvieron para frenar una dinámica de tres derrotas consecutivas (Las Palmas, Sevilla y Athletic) en la competición doméstica.
Tres goles consecutivos marcados de cabeza
Dos resultados guiados a través de la cabeza. Y es que tres de los cuatro goles marcados en dichos compromisos llegaron de esa manera. Todos de manera consecutiva y tras 53 partidos previos sin haber podido marcar un tanto de este método. En Mestalla frenó esa racha Pathé Ciss en un balón parado a los seis minutos (el único remate a puerta del conjunto franjirrojo en ese partido).
Así también abrió el resultado Unai López ante el Real Madrid. Abdul Mumin no quiso ser menos y, pasada la media hora de juego, también marcó el segundo de cabeza. Isi Palazón no quiso continuar con esa racha y en la segunda parte rozó el centro-chut de Lejeune con la puntera de la bota para desviar la trayectoria lo justo y evitar que Courtois detuviera el balón.