La jubilación en España está intrínsecamente ligada al tiempo cotizado y la edad del trabajador. Este vínculo determina no solo cuándo se puede acceder a la jubilación, sino también el monto de la pensión a recibir.
Para quienes han acumulado 15 años de cotización, el panorama es claro, ya que tendrán que esperar hasta la edad legal de jubilación para poder retirarse y no podrán cobrar la pensión completa.
En 2024, la edad legal de jubilación en España es de 66 años y 6 meses para aquellos que han cotizado menos de 38 años. Por lo tanto, una persona con 15 años de cotización no podrá jubilarse antes de alcanzar esta edad.
Esta norma aplica a la mayoría, salvo para aquellos que hayan acumulado más de 38 años de cotizaciones, quienes podrán jubilarse a los 65 años. Además, este umbral de edad y los años necesarios de cotización están sujetos a incrementos progresivos: la edad legal aumentará hasta los 67 años en 2027, y los años de cotización requeridos para jubilarse a los 65 años subirán a 38 años y 6 meses en el mismo año.
En este contexto, quienes no hayan cotizado de manera continua a lo largo de su vida laboral enfrentarán una jubilación cada vez más tardía. Para acumular los 38 años necesarios en 2024, un trabajador tendría que haber comenzado su vida laboral a los 27 años y haber trabajado sin interrupciones.
Jubilación con 15 años cotizados
La pensión pública española también depende directamente del tiempo cotizado. Para obtener el 100% de la pensión, es necesario haber cotizado durante 36 años y medio. Con solo 15 años cotizados, un trabajador tendrá derecho a un porcentaje limitado de su base reguladora. En concreto, recibirán el 50% de dicha base, la cual se calcula tomando las últimas 300 bases de cotización a la Seguridad Social y dividiéndolas entre 350. Esta cifra representa el 100% de la base reguladora sobre la cual se aplicará el porcentaje correspondiente a los años trabajados.
Para ilustrar mejor este cálculo, imaginemos a un trabajador con una base reguladora de 1.500 euros mensuales y 15 años de cotización. Aplicando el 50% correspondiente, este trabajador recibiría una pensión mensual de 815 euros.
Jubilación contributiva, pero muy baja
El sistema de jubilación español, por lo tanto, establece un esquema claro: aunque con 15 años cotizados se llega al mínimo de 15 años necesarios para acceder a la pensión contributiva, el monto recibido será proporcional al tiempo efectivamente cotizado. Esto significa que, aunque la jubilación es posible a la edad legal, la cuantía de la pensión será sustancialmente menor que la de aquellos que han cotizado durante más tiempo.
Este esquema busca incentivar una mayor continuidad en las cotizaciones a lo largo de la vida laboral. Sin embargo, también plantea desafíos significativos para quienes han tenido trayectorias laborales discontinuas o quienes comenzaron a trabajar tarde. La progresiva elevación de la edad de jubilación y el aumento de los años necesarios para obtener la pensión completa reflejan un intento de adaptar el sistema a la realidad demográfica y económica, donde la expectativa de vida es mayor y la presión sobre el sistema de pensiones crece.
Por tanto, para quienes han cotizado 17 años en el sistema español, la jubilación solo será posible al alcanzar la edad legal establecida, y la pensión recibida será proporcional a ese tiempo cotizado, específicamente el 55,04% de la base reguladora. Con el paso del tiempo, las reformas y ajustes en el sistema de pensiones continuarán adaptándose a las circunstancias cambiantes, pero el principio básico permanecerá: el tiempo cotizado es crucial para determinar tanto la edad de jubilación como el monto de la pensión.